
Se dice que ‘la comida entra por los ojos’, y esto es muy cierto. Si presentamos un plato bien preparado pero servido con descuido y de cualquier manera, a las personas – incluyendo a los niños – no les parecerá tan apetecible como si se sirve el mismo platillo pero servido de una forma agradable y estética.
Hace unos días vi en un programa de TV un experimento que hizo una cadena de restaurantes: invitaron a doce comensales a comer, a seis de ellos se les llevó a un restaurante donde no había manteles, las mesas eran rústicas y la comida se servía sobre platos desechables, sin poner cuidado en su presentación. A los otros seis los llevaron a un restaurante con bonitos manteles, flores en el centro de la mesa, cubiertos y servilletas colocados con delicadeza, y los platillos estaban servidos con arte. El contenido de los platos, era exactamente el mismo para ambos grupos.
Al final de la comida, se les hizo una encuesta personal a ambos grupos de comensales. Fue sorprendente, pero los comensales del lugar donde, además de la comida, el ambiente y el arreglo de los platillos eran visualmente atractivos, le dieron al chef un calificación de ocho a diez (de diez puntos). Asimismo, dijeron que por un platillo así estaban dispuestos a pagar una buena suma de dinero. En cambio, los invitados al otro lugar, en donde la comida era la misma, pero el ambiente y la parte visual de los alimentos no habían sido tomados en cuenta, calificaron al chef con notas entre dos y cuatro, y dijeron que por ese tipo de comida pagarían un precio muy bajo.
Queremos que nuestros esfuerzos y el amor que se pone en la cocina tenga como resultado un alto nivel de satisfacción en nuestra familia y las personas que comen nuestros platillos, ¿no es cierto? A continuación, unos consejos que harán que presentar los alimentos en forma bella y atractiva sea fácil.
- El mantel, la vajilla, cubiertos, servilletas y vasos deben ponerse con cuidado y estética. Tome en cuenta que a las personas les gusta más comer sus alimentos colocados sobre platos de color claro, y no comen mucho si el plato es negro, azul o café oscuro. Si está pensando en adquirir una vajilla, elija una de colores neutrales y evite las que tienen decoraciones muy llamativas, para que no choquen con el color de los alimentos. Para servir aperitivos use platos de cristal o tablas de madera.
- Consistencia y color de la comida cocinada: Tenga cuidado de no cocer en exceso la comida, especialmente los vegetales, ya que eso los hace perder su color, consistencia y propiedades alimenticias. Por lo general no nos gusta comer las verduras demasiado blandas.
- Verduras: Escoja verduras de colores diversos, experimenta con ellos, use las de colores brillantes. Corte la verdura en trozos del mismo tamaño; algunas – como la zanahoria – quedan bien en juliana. Es muy agradable la presentación de las verduras cortadas con formas bonitas, pero esto toma mucho tiempo; una buena idea es obtener un procesador de alimentos con cuchillas para cortar en formas diversas, lo que hará que el tiempo de preparación sea mucho más rápido.
- Ensaladas: Para que siempre estén frescas y atractivas, quite las hojas marchitas.
- Color: Adorne sus platillos con comida que le den un toque de color.
- Tenga a la mano macetas con hierbas frescas para decorar (menta, albahaca, perejil, cilantro, yerbabuena, tomillo, romero, orégano, etc.)
- Dore el pollo antes de añadirlo a un guisado, así evitará que tenga un aspecto pálido y menos apetecible.
- Combine los colores. Por ejemplo, una salsa blanca con pollo cocido, papas y coliflor es poco apetitosa, en cambio la misma salsa blanca con pollo cocido, arvejas y zanahorias resulta mucho más atractiva.
- Utilice para decorar tomates cortados en gajos o rodajas, tomates cherry, huevo duro en gajos o rodajas, chile pimiento, aceitunas rellenas o sin semilla, limones cortados en rodajitas delgadas o en espiral, rabanitos rodajados o con formas, granos de café tostado o un poquito de chocolate, granos de maíz cocido, etc.
- Aroma: Nos gusta la comida que huele bien. No deje de añadirle especies y hierbas, las cuales le dan un delicioso olor y mejor sabor. Pruebe poner menta o yerbabuena a los postres y frutas, y romero, tomillo, perejil, albahaca, etc. a los platos salados.
Presentación:
- La comida apilada en un montón y presentada de cualquier forma no es apetecible, un plato bien presentado satisface todos los sentidos.
- Trate de no servir los alimentos dentro de la salsa. Es más estético pasarlos con un poquito de salsa encima; ponga la salsa en un recipiente aparte.
- Sirva la comida con cucharas grandes de servir, queda mucho mejor la presentación así que con cucharas pequeñas.
- Sirva la pasta con el tenedor de espagueti, formando montañitas en el centro del plato.
- Ponga chorritos de salsa en los platos, a manera de decoración.
- Ponga un poquito de crema fresca o yogur en las sopas, en forma de espiral, o coloque un poco en el centro y muévala creando círculos.
Esperamos que estas sugerencias hagan que el ‘valor’ de sus platillos aumenten a los ojos de sus seres queridos, recuerde que un plato bien cocinado y – además – bien presentado, satisface a todos los sentidos.
Jorge